Soledad, pérfida arpía

Maliciosa hija, ladina,
de instantes llenos de nostalgia,
hija de lágrimas,
de penas y dolores que cual puñal
se clavan.
Siniestra, perversa hija de un segundo oscuro,
donde la tiniebla amenaza y el recuerdo mata,
monstruosa soledad, 
amante de silencios y quimeras vacuas,
sierpe ponzoñosa que envenenas el alma
y nos enjaulas en prisiones vacías,
hondas, llenas de luto y melancolía,
pérfida arpía ocupando nuestro aire
para trocarlo en desdicha,
infame demonio, ¡Soledad maldita!


Comentarios

Ingrid Vort ha dicho que…
Dama irreverente,
que baila el vals
de las horas muertas,
falsa luciérnaga
que encandilas,
sierpe ponzoñosa,
para apresarnos
en una jaula de desesperación
donde el pájaro del silencio
sobrevuela, cual ave carroñera,
para devorar nuestro corazón.
WeVampires ha dicho que…
¿Quién eres? Tus palabras resuenan en mis sombras y logro poder ver las tuyas. ¿Quién eres? Tu lúgubre luto devenido en versos me ahoga, sofoca y me conquista. ¿Quién eres? Tus tinieblas susurran belleza y me pregunto "¿Quién eres?"
Ingrid Vort ha dicho que…
¿Y Vos, quién sois? Que aconteces en mis ennieblados senderos, musitándome lóbregos versos, irrumpiendo en mi oscuridad con tus alas abiertas, calígine majestuosa que troca, todo el crepúsculo, en hermoso poema.

Bienvenidas sean tus sombras, ¡Agradecida quedo, WeVampires!